Si dios me
reencarna,
Con un eco
agudo, en un pollo,
Parte de
una familia y
No en una
granja de diciembre,
Mi
preocupación sería
La comida
verde.
Vivo en un
corral
Y me ven
con otros ojos,
No basta
con mi vida.
Lo que les
puedo dar,
En el
cumpleaños del amo
O la muerte
de la suegra,
Terminaré
en la boca de un perro,
Que se
queja de los huesos.
Y quizás en
su ácida saliva
Valga un
poco más.
Y la luz
que me dio la vieja rata:
cómo vivir,
Y escapar
al monte.
Ser un
pollo libre.
Me mantiene
vivo.